sábado, 5 de febrero de 2022

No hay nada que discurra

como el agua.

No hay nada que respire

como el aire.

No hay nada como una estrella

que ilumine el vacío.

No hay nada como la palabra

que rompe el silencio.

No hay nada que indique que

mi dedo es la nada en mi mano.

No hay nada como tu cuerpo

extendido sobre mi cuerpo.